Caricatura de Rafael Barajas "fisgon"
La terrible crisis por la que traviesa México a acentuado las grandes desigualdades sociales que el país viene arrastrando históricamente y que en los últimos años han generado una dolorosa descomposición social. Resulta indignante como ante una pobreza generalizada, los encargados del poder político en México se pavonean como millonarios a costa del erario público al tiempo que exigen una mayor carga fiscal sobre los que menos tienen. La corrupción, que tanto daño ha hecho a nuestro país históricamente es tolerada de manera desvergonzada por las altas esferas del poder en México. Asistimos el próximo año a la celebración del bicentenario de la independencia y centenario de la gesta revolucionaria ante una situación que amenaza terminar con un estallido social.
La crisis financiera mundial golpeo a nuestro país como a pocos, ante la “indiferencia” inicial del gobierno federal, que quiso compararla con un “catarrito”, que termino en influenza, esta golpeo a nuestro país de tal manera que obligo a recular a nuestros gobernantes reconociendo tardíamente que estábamos ante una de las peores crisis de la historia. Claro, que no se tomaron medidas precautorias al respecto y ante la perdida de más de medio millón de empleos aunado a los ya de por si no generados y ante la baja en las remesas de los connacionales que viven en el extranjero, el gobierno no atina a justificar su ineficiencia.
En México, se viene diciendo desde hace decenios que “estamos cerca” de terminar las hondas desigualdades sociales. Pero la verdad es que en los últimos años estas han crecido de manera alarmante. El desempleo en todos los ámbitos productivos, el constante recorte presupuestal rubros tan necesarios para la mayoría de la población como lo son la educación y la salud han sido sin duda un factor detonante en el incremento en el número de pobres.
Y para colmo, ante un Estado que ha visto mermado sus ingresos ante la decreciente extracción petrolera, la constante evasión fiscal de las grandes empresas, el saqueo impune y desmesurado de funcionarios corruptos; ahora estamos ante políticos sin agallas, que ocupando altos puestos en el gobierno y no conforme con las ganancias que logran de sus corruptelas, estos ostentan altísimos salarios, muy superiores a funcionarios de similar rango en países desarrollados.
- Salario promedio de un trabajador/empleado: $1,500 pesos mensuales
- En dolares americanos: $111.80
- En moneda europea: €76.80
- Salario de un ministro de la Corte: $347,647 pesos mensuales
- En dolares americanos: $25964
- En moneda europea: €17804
Ante la constante evación fiscal de las grandes empresas, la carga tributaria la llevan los que menos tienen. Si bien en varios países, principalmente los desarrollados, la carga fiscal a las personas físicas es alta, esta suele verse reflejada en los servicios sociales, cosa que no pasa en México, donde una gran parte de lo recaudado se va en gasto corriente y en los altísimos salarios de funcionarios corruptos que permiten el que grandes empresas como wallmart paguen al fisco cantidades ridículas de impuesto.
Mostrando una enorme insensibilidad hacia la mayoría del pueblo que viene arrastrando la mayor parte de la crisis, el gobierno federal acaba de presentar su propuesta de paquete fiscal para el próximo año, donde trataran de cargar aun más la carga tributaria en los que menos tienen. El aplicar la tasa del IVA a alimentos y medicinas, así como los incrementos mensuales en combustible y bimestrales en energía eléctrica no solo incrementara el descontento social sino que empobrecerá aun más a los ya de por si millones de mexicanos que de manera “milagrosa” sobreviven a la catástrofe a la que nos han llevado nuestros gobernantes.
Estamos a un año del bicentenario de la independencia y centenario de la revolución y la ocasión pinta para un estallido social que el gobierno en turno parece no importar.
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